Hermosa noche de viernes la que pasamos en Uniclub el 5 de abril. Russian Circles tocaba en Argentina por primera vez y la banda que oficiaba de acto soporte eran los cordobeses de Iah. Creo que el maridaje de estos dos grupos fue excelente. Dos tríos super potentes que nos dejaron el cerebro en pausa por varios minutos a los asistentes. Todo comenzó alrededor de las 19:45 cuando la banda Iah pisó el escenario y con un sonido impecable que golpeaba el pecho desde el comienzo, dejó el escenario caliente para la banda norteamericana. El grupo el año pasado sacó su quinto disco:” V” y vienen tocando bastante este 2024 para seguir presentándolo. La primera vez que los veo en vivo y si bien sus discos son una experiencia agradable, recomiendo que vayan a verlos porque se disfruta
todavía más y tiene otra fuerza que sólo se transmite en vivo.
Llegaba el momento del plato principal. El trío oriundo de Chicago debutaba en estas tierras. Me llamó la atención que para la prueba de sonido dejaran las cortinas abiertas y ellos mismos conectaran y afinaran sus instrumentos. No debería ser tan raro, pero en el rock hay mucha estrella y toda una cuestión de suspenso y sorpresa antes de abrir el telón.
En fin, nada de esto importó cuando la banda salió y nos pateó el culo de la forma en que lo hizo. Y ahí es donde está el rock de verdad y ninguna de las otras cuestiones que mencioné anteriormente. La solidez y la precisión que demostraron: Brian Cook en bajo, Dave Turncrantz en batería y Mike Sullivan en guitarra. Una prolijidad envidiable, el sonido claro y fuerte. El grupo apenas si saludó con gestos al público y se abocó 100% a la tarea de dar el mejor show posible. Arrancaron con “Station” del álbum del mismo nombre y le pegaron “Harper Lewis”. Un arranque que hasta este día solamente podíamos soñar. El grupo está presentando “Gnosis” su último disco de ahí tocaron tres canciones “Conduit” fue una de las representantes. El trío casi no deja intervalos en silencio y cuando hay un bache entre tema y tema, Brian Cook dispara unos sonidos “drone”, es decir ruidos y frecuencias que luego se funden con las guitarras de Mike creando climas y paisajes. Sullivan toca su guitarra y deja los riffs loopeados en la pedalera mientras arriba toca y dibuja otra cosa al mismo tiempo, es algo realmente admirable lo que hace el guitarrista en vivo. “Afrika” fue el único tema del álbum “Guidance” (2016) y “Quartered” (a excepción de la intro) el único de Blood Year (2019). Por supuesto que quisiéramos que toquen más temas pero tendrían que tocar horas. De hecho ni sé cuánto duró porque se me hizo corto, casi que ni miré el reloj mientras tocaron las bandas. “Betrayal” y “Gnosis” de su última placa demostraron que el grupo tiene una buena actualidad. La gente festejó mucho “Youngblood” (lo más parecido a un hit) hasta se formó un pogo adelante. Y el cierre con “Mladek” con el público totalmente entregado. Una jornada con dos tríos que suenan como súper grupos. Uno local y otro de afuera. Ojalá Pelican copie el ejemplo de Russian Circles y baje por estos lados. Pero sepan que la vara quedó altísima.
Fotos x Eushy Fernandez
Cronica x Tony Esmoris